
Los romanos explotaron una mina aún más antigua, pero construyeron galerías subterráneas ventiladas y elaboradas, yendo más allá de lo que se creía posible en ese momento.La mina de Munigua suministró al Imperio Romano grandes cantidades de hierro y cobre hasta finales del siglo II dC, cuando todas las minas en Hispania fueron cerradas.
+info: http://www.haaretz.com/archaeology/1.774629